El proceso de dejar el pañal, avisar cuando se tienen ganas de ir al baño y controlar el esfínter, es un proceso natural del ser humano. No hay una edad específica (como todos los cambios y desarrollos del bebé, pues todo son distintos), generalmente se da de manera natural pues al niño le comienza a molestar al pañal o por sí solo te empieza a avisar que tiene ganas de hacer sus 'necesidades'.
Algunos comienzan la transición cerca del año y medio de edad, y otros no lo hacen antes de los 3 años. Lo importante es estar atentos a algunas señales que pueden indicar que están listos para dejar el pañal:
-
Le incomoda tener el pañal sucio aunque sea por pocos segundos.
-
Puede pasar 2 horas sin ensuciar el pañal.
-
Avisa cuando quiere hacer o ya se hizo.
Por lo que el primer consejo o pre-consejo es reconocer las señales. No lo apures, pues hay un mínimo desarrollo fisiológico como requisito, el cual tiene que ver con la capacidad de control del esfínter.
Consejos para ayudarlos en la transición
1.- Sin etiquetas
Cuando ocurran 'accidentes', no alcance a llegar al baño, moje su cama y/o su ropa, etc., tómatelo con humor, o al menos no lo retes ni uses palabras como 'asqueroso'. Es casi imposible que esta etapa no presente este tipo de momentos no perfectos: tienes que entender que es un periodo de aprendizaje, y como en todos, el ensayo y error es una parte importante de la enseñanza.
2.- Se constante, crea una rutina
Sienta a tu hijo en una pelea o llévalo al baño en los horarios que usualmente hace sus necesidades. Pero no lo fuerces si no quiere sentarse. Crear rutina es clave, pues el cuerpo es como un reloj. Puedes llevarlo a su baño al despertar o antes de acostarse.
También puedes llevarlo a que te acompañe y observe cuando tú vas al baño, para que aprenda y entienda que es totalmente normal.
3.- Atracción
Algunos padres eligen darle pequeños premios al principio cuando hay alguna 'operación' exitosa. También pueden embellecer su esquina del baño con una sillita o espejo, o una caja de juguetes para que no se aburra y se sienta cómodo mientras está aprendiendo a acostumbrarse.
4.- Ropa fácil de quitar
Este consejo va dirigido para tu hijo y para tí, pues luego de ir corriendo al baño y demorarte más en quitarle su ropa, puede dificultar aún más el proceso. Usa ropa que se saque rápido y que no le quede tan apretada.
5.- Incentivo a dejarlo
Algunos papás les proporcionan pañales que no absorben tanto (o usan los de tela) para que así el pequeño sienta la humedad y decida sacárselos. Es una manera de motivarlo y hacerlo consciente de lo que sucede con sus necesidades. Naturalmente va a querer empezar a ir al baño.
¡Suerte en esta nueva etapa! Como siempre, todos los procesos y cambios en la vida de los niños requieren tiempo y paciencia. No te compares con los otros pues cada uno tiene su ritmo único. Apóyalo y ayúdalo a que dejar los pañales sea lo más natural posible.