Irritación por dentición
Algo tan inocuo como la saliva de los bebés puede irritar su sensible piel, haciendo que se vuelva roja e irritada, lo que es particularmente frecuente cuando le están apareciendo los primeros dientes. Esto debido a que sus encías están inflamadas por lo que el bebé se las palpa con su lengua y además muerde cualquier cosa que encuentre, produciendo más saliva de lo normal.
La irritación de su mentón y cuello durante la etapa de dentición generalmente no es motivo de preocupación y, a menudo, mantener el área lo más seca posible (sin frotar su piel) puede ayudar. Sin embargo, si alguna vez te preocupa que la erupción sea algo más grave, comunícate con un profesional de la salud.
Sarpullido por contacto con la naturaleza
Es posible que tu bebé o hijo pequeño haya entrado en contacto con algo externo, como hojas, pasto u otras hierbas, que ha irritado su piel y le ha causado irritación o enrojecimiento.
Según los expertos, las erupciones cutáneas resultado del contacto con la naturaleza generalmente desaparecen por sí solas, pero si se presentan junto con otros síntomas como hinchazón de la cara o dificultad para respirar, debes acudir inmediatamente a un médico.
Reacción alérgica alimentaria
La erupción en la piel de tu bebé también puede ser resultado de alergias a ciertos alimentos. Cuando un cuerpo trata por error a las proteínas que se encuentran en ciertos alimentos como una amenaza, libera sustancias químicas que causan los síntomas de una reacción alérgica (que puede incluir erupciones cutáneas).
Los huevos y la leche son alimentos alérgicos comunes, al igual que los mariscos. Si crees que tu hijo tiene alergia a algún alimentos, quítalo de su dieta inmediatamente y habla con un profesional de la salud quien te asesorará sobre cómo establecer y controlar la alergia.
Erupciones cutáneas por productos químicos
Muchas personas asumen que la piel de los niños es menos sensible una vez que dejan de ser recién nacidos, pero ese no es necesariamente el caso. Muchos productos, desde jabones hasta champús, pueden contener perfumes o productos químicos que irriten la piel de tu bebé. Si notas sequedad y enrojecimiento, intenta determinar si puede deberse a un nuevo producto y evita usarlo.
"Mi esposo compró unas toallitas húmedas baratas para mi hijo cuando tenía casi tres años", dice Claudia, mamá de Manuel. "Contra mi mejor juicio, los usé para limpiarle la cara y las manos luego de que él solito fuera al baño. Aproximadamente una semana después, la piel alrededor de su boca estaba toda roja y adolorida. Estaba tan molesta conmigo misma por no confiar en mis instintos (¡y con mi esposo aún más por comprarlas, obviamente!)".
Si llegas a utilizar algo que irrite la piel de tu hijo, trata de no sentirte demasiado culpable, es algo muy común y le puede pasar a cualquiera. Sin embargo, es importante que tengas en mente que algunos productos químicos pueden irritar y enrojecer la piel de tu bebé.
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En última instancia, las alergias a la piel son comunes y a menudo inofensivas, pero si alguna vez te preocupa la erupción cutánea de tu hijo o dura más de lo normal, busca atención médica.